Al buscar proveedores para arrancar un negocio, es fácil quedarse con el primero que encuentres y que ofrezca los productos que necesitas. Sin embargo, encontrar un proveedor que coincida con tus objetivos y al que le puedas depositar tu confianza es más complejo, pero muy importante, ya que de esto puede depender el éxito de tu proyecto. Es por eso que debes saber cómo reconocer a esos proveedores que más allá de venderte insumos o productos, pueden convertirse en verdaderos aliados que te ayuden a alcanzar tus objetivos.
¿Cómo identificar a tu proveedor ideal?
Antes de elegir a tus proveedores, debes tener bien identificado el giro de tu negocio, la audiencia a la que te quieres dirigir y la propuesta de valor de tu producto, tomando en cuenta variables como calidad, precio o tamaño. Esta información es relevante para que sepas exactamente qué pedirle a tus proveedores. Lo que sigue es identificar el tipo de proveedor que se ajusta mejor a tus necesidades. Este puede ser un vendedor de materias primas, un fabricante que se encargue de materializar tu idea de producto, un distribuidor mayorista o incluso un dropshipper, en caso de que te interese que el proveedor haga las entregas directamente a tus clientes y tú solo encargarte de la labor de venta.
Otro rubro importante que debes cubrir al momento de buscar aliados para consolidar tu idea de negocio es encontrar proveedores que te ayuden a darle a tus clientes un mejor servicio. Ten en cuenta que el éxito de un negocio no sólo depende de la calidad de sus productos, sino también de la experiencia de compra que brinda a su clientela. Por ejemplo, un negocio que ofrece distintas opciones de pago, además del efectivo, aumenta sus posibilidades de concretar ventas, especialmente en un momento donde el comercio digital ha tomado mucha fuerza. Un aliado como EVO Payments, que ofrece distintas alternativas de cobro que se adaptan a tus canales de venta, puede ser de mucha ayuda para el éxito de tu proyecto de negocio.
¿Dónde encontrar a tu proveedor?
Existen diferentes lugares para encontrar al proveedor ideal para tus productos. Las opciones más tradicionales son las ferias, exposiciones y convenciones, algunas de las cuales están especializadas en diferentes tipos de industria. Sin embargo, esta alternativa se ha visto interrumpida debido a la pandemia, por lo que algunos de estos eventos se han digitalizado. Precisamente, otra forma para encontrar proveedores es en línea, donde además de los eventos digitales, puedes encontrar directorios y plataformas de comercio, e incluso utilizar motores de búsqueda como Google. En el último caso, es recomendable que pruebes utilizando diferentes palabras clave para incrementar la variedad de tus opciones de proveedores.
El proceso no termina ahí, ya que ahora falta contactar a los posibles proveedores. Para conocerlos mejor, es importante que envíes una solicitud de presupuesto para averiguar qué cotización conviene más a tu negocio. Además, puedes solicitar una muestra del producto si te interesa conocer el tiempo de respuesta y la forma de operar de tus proveedores potenciales. También es recomendable que busques opiniones de otras personas que ya trabajan con el proveedor y pidas referencias. Antes de cerrar un trato, te sugerimos conocer la cartera de clientes del proveedor, para que sepas si tiene experiencia trabajando con negocios como el tuyo, de modo que entienda sus necesidades y pueda ser un mejor aliado.
Una vez que identifiques al proveedor ideal, es importante que negocien aspectos como las condiciones de pago, los plazos de entrega y las cantidades mínimas por orden. Lo más conveniente para tu negocio es lograr los términos de pago más amplios posibles, así como eliminar los pedidos mínimos. Especialmente en tiempos tan inciertos como los de la nueva normalidad, el panorama de cualquier negocio puede cambiar de un momento a otro, provocando que la demanda no sea constante y, por lo tanto, el flujo de efectivo tampoco.
Finalmente, recuerda que son necesarias la confianza y la comunicación constante para optimizar y cuidar la relación que tienes con tu proveedor, especialmente mientras persista la crisis económica, ya que es más necesario que nunca trabajar en equipo para salir adelante.
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